viernes, 25 de enero de 2013

Fundacion Excelentia. Smetana/Elgar/Dvorak



Género: Concierto
Local: Auditorio Nacional
Interpretes:  
Orquesta Clásica Santa Cecilia 
DirectorHenrik Schaefer

Solista
Jacob Koranyi, cello


Programa



Bedrich Smetana (1824-1884)

Die Moldau

Edward Elgar (1857-1934)

Concierto para cello y orquesta en Mi menor Op. 85



Antonin Dvorák (1841-1904)

Sinfonía núm. 8 en Fa mayor Op. 88

  • Allegro con brio
  • Adagio
  • Allegretto grazioso - Molto vivace
  • Allegro, ma non troppo

Henrik Schaefer

Ser el miembro más joven de la Filarmónica de Berlín en 1991, pone de relieve sin dudas, su brillante comienzo en su carrera profesional. De 1994 a 1998 estudia dirección de orquesta en Leizpig y en 2000 es elegido por Claudio Abbado como director asistente de la Filarmónica de Berlín.

Henrik Schaefer es director habitual de la Värmlands Opera de Suecia y director principal invitado de la Hiroshima Symphony Orchestra de Japón.

Su exitosa carrera en realizaciones operísticas incluye: Fígaro (Leipzig 03), Onegin (Chemnitz 05), Faust (Seoul 06), Parsifal (Karlstad 07), Les Carmelites (Den Haag 07), Fígaro (Göteborg 07/08),  Boheme (Karlstad 08), Cosi fan tutte (Den Haag 09) and Magic Flute (Hedeland 09 & Göteborg 09/10).

Henrik Schaefer es invitado regularmente en orquestas tales como Norrköping Symphony, Tokyo Symphony, Tokyo Metropolitan, New Japan Philharmonic, Holland Symfonia, BBC Scottish, Osaka Philharmonic, Flemish Symphony, Hiroshima Symphony, Teatro Regio di Torino, Stuttgarter Philharmoniker, Dutch Radio Symphony y Chamber Symphony, Orchestre de l´Opera de Rouen, Sapporo Symphony y Helsingborg Symphony.

En la temporada 2009/2010 debutó con la Tromsö Symphony de Noruega, la Aalborg Symphony de Dinamarca, la Orkest van het Oosten y la Netherlands Philharmonic de Holanda. 

De 2000 a 2003 fue director asistente de Claudio Abado, y tuvo la oportunidad de dirigir en numerosas ocasiones a la Filarmónica de Berlín. Tristan, Parsifal y Falstaff son algunas de las óperas que ha dirigido en este tiempo, así como sinfonías de Mahler y Bruckner. Sacre du Printemps con la Gewandhausorchester Leipzig en 2001 marcó el inicio de su carrera como director de orquesta.


Jakob Koranyi

Tras recibir el segundo premio en el Concurso Rostropovich de 2009 en París, el joven chelista sueco Jakob Koranyi ocupa un puesto privilegiado como uno de los mejores solistas europeos de estos momentos. Numerosos son los premios obtenidos en los más prestigiosos concursos internacionales, tales como en el Verbier Festival.

Entre sus recientes actuaciones, destacan los conciertos con la Stockholm Royal Philharmonic Orchestra, Swedish Radio Symphony Orchestra, Orchèstre de Paris, Orchestra Filharmonia Veneta, Malmö Symphony Orchestra, Helsingborg Symphony Orchestra y Norrköping Symphony Orchestra, con directores como Okku Kamu, Eiji Oue, Krzysztof Urbanski, Lionel Bringuier, Andrew Manze, Stefan Solyom, Thomas Söndergaard, Susanna Mälkki y Christian Lindberg.

Comprometido con la música de cámara, Jakob Koranyi colabora con músicos distinguidos, tales como el pianista Denis Kozhukhin, ganador del Queen Elizabeth Competition de 2010, así como con Yuri Bashmet, Kirill Troussov, Kim Kashkashian, Leonidas Kavakos, Misha Maisky, Daniel Hope, Renaud Capuçon, Lawrence Power y Julian Rachlin. Jacob Koranyi es miembro de la Chamber Music Society Two Program en el Lincoln Center desde 2009.

Jakob Koranyi se formó en el Edsberg Institute of Music con el profesor Thorleif Thedén, después de lo cual continuó sus estudios con distinciones honoríficas en el Royal Northern College of Music de Manchester con Ralph Kirshbaum. Además ha estudiado con Frans Helmersson en el Musikhochschule Köln.

viernes, 4 de enero de 2013

Cyrano de Bergerac


Género: Teatro
Local: Teatro Valle Inclan


Autor:  Edmond Rostand
Dirección: Oriol Broggi
Interpretes:  Pere Arquillué, Marta Betriu, Babou Cham, Jordi Figueras, Isaac Morera, Andrea Portella, Bernat Quintana, Cecilia Valencia, Ramon Vila, Pau Vinyals

Información adicional

Cyrano me ha robado el corazón. Es conmovedor y encantador, te engancha desde el principio y seduce. Es un hombre fuerte, ágil, inteligente, un líder. Es buena persona, agudo, atrevido, valiente, ligeramente impertinente e irónico. Consigue ofender pero a la vez atrae. Es un caballero orgulloso y coherente, un hombre íntegro que jamás aceptaría venderse. Ágil con la espada y con el verso. Un hombre total: bueno en las letras y en la batalla.

Así presentado, parecería el hombre perfecto, pero no. No, la perfección no existe... y Cyrano tiene un problema. Una deformación que se concentra en su gran nariz. La jugada del autor es magnífica, porque la nariz es lo que lo hace imperfecto. Es la muestra visible de la imperfección. Cyrano está obsesionado con su nariz desproporcionada y su problema con ella se enquista en su espíritu y tiñe toda su existencia, que se vuelve por ello complicada y difícil. Sufre.

Cyrano es fuerte y valiente (tiene todas las cualidades de un hombre) y a la vez es extremadamente sensible y dado a la palabra. Un hombre que acaba seduciendo no por su físico sino a través del pensamiento y la poesía. A través de la palabra afilada. Finalmente, el defecto de Cyrano (su gran nariz) le hace ser más brillante, pero le hace sufrir desmesuradamente. Y cuando conoce a Cristià, joven y guapo, fabrican un juego inteligente que va tejiendo una trampa para los personajes. Un juego muy shakespeariano que consiste en hacer teatro dentro del teatro. Suplantar personalidades, llegar al espectador de forma clara: si interpretas a otro creces con él, y te metes en mundos peligrosos pero preciosos.

La obra de Cyrano es una maravilla y el argumento está muy bien elaborado. También por la frescura de los versos y su forma de llegar al alma de todos los espectadores. Lo que Cyrano dice a Rosaura es precioso. Te hace estremecer y emocionar. En tiempos de crisis buscamos emociones fuertes y «totalmente tremendas». Buscamos con ansia aquello que hace vibrar el cuerpo y el alma. Aquello que te hace reír mientras lloras. Cyrano es una obra de mosqueteros, con peleas, bailes, espadas, carreras, guerras, amor, teatro, canciones, traiciones, conspiraciones, emoción, muerte y más amor. Una obra completa y extraordinaria








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